miércoles, 27 de diciembre de 2023

Volver a Extremadura pasando por Brozas

 



 

            Estos días navideños uno ha repasado un libro de su biblioteca titulado “Volver a Extremadura” publicado en 2013, en la colección “La Quintana” por José María Peña Vázquez por la Asociación Cultural “Beturia”, la editorial de un grupo de extremeños, cuya sede se encontraba en el Hogar Extremeño de la Gran Vía de Madrid y de la que un servidor es socio desde sus comienzos. El prólogo está a cargo de Luis Garraín Villa cronista oficial de Llerena.

 




            José María nació en 1939 en Llerena; se licenció en Derecho y trabajó en la Administración Civil del Estado como subdirector general en diversos ministerios, jubilándose en 2004. Desde entonces se dedicó a escribir, contando en su actividad más de 700 artículos. Para escribir este libro de viajes quiso hacer el camino por Extremadura que en el siglo XVIII hizo el abate Antonio Ponz, en su libro “Viaje de España” en 17 volúmenes. Antonio Ponz nacido en 1725 en Castellón fue académico de la Historia y secretario de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

 

            El libro contiene doce capítulos, repasando el viaje de Antonio Ponz por nuestra tierra, comenzando por Guadalupe, siguiendo por las Villuercas y los Ibores y el Campo Arañuelo. El cuarto capitulo está dedicado a Plasencia, la Vera y el Jerte y el quinto a Monfragüe, para seguir por Trujillo a las Vegas Altas. El séptimo va desde Baños de Montemayor por Cáparra a Coria y el octavo hacia Alcántara por Ceclavín; le sigue el dedicado a nuestra comarca de Alcántara a Cáceres por Villa del Rey, Brozas y Arroyo de la Luz, para ir después de Cáceres a Mérida; el 11 de Mérida a Badajoz y concluye el duodécimo de Badajoz a Llerena. Para mí, el libro tiene una gran pega: Las fotos, hechas por el mismo autor, son muy pequeñas y no dan idea de la belleza que muestran. En un libro de viajes, no todo es literatura.

 

            Cuenta Antonio Ponz de esta comarca en su libro de “Viaje de España” lo siguiente: Casi todo el territorio que alcancé a ver desde Alcántara a Villa del Rey es inculto, y aun hasta Brozas, que me figuro será la causa el estar destinado para pastos de ganado merino”.

 

            José María Peña comienza su trabajo, de una manera muy poética, sobre nuestro pueblo hablando de que Brozas es silencio encantado cuando la recorro, primero reconociendo su amplísimo trazado desde el coche, luego a pie cuando el silencio se vuelve espeso con el retumbar de los pasos que espantan el trajín sonoro de los pájaros. El carillón de opereta del Ayuntamiento resulta un guiño de modernidad a los muchos turistas que debiera haber en un lugar como este, pero que no los hay”.

 

            El autor recorre la villa de Las Brozas, describiendo la iglesia de Santa María la Mayor de la Asunción, los Santos Mártires (Fabián y Sebastián), la casa de El Brocense y hasta la churrería del pueblo, que entonces vendía los churros a pesetas, así como “una capilla armada en piedra, pero que un policía municipal de entonces le dijo que no era una iglesia.

 




            Como siempre que he ido a Brozas me gozo con la originalidad del retablo de oscura madera sin dorar, ante el soberbio órgano siempre silencioso para mí y contemplo la meritísima y sencilla portada renacentista de la iglesia mayor de Santa María de la Asunción, grande como una catedral.  Cuenta que un broceño que vive en el País Vasco le dijo que “un cura de Vitoria donde trabajo vino con una excursión de allí y después me dijo que “cuidado que había visto muchas bonitas en su vida, pero ninguna como esta”

 

            También cuenta la lápida del médico benefactor, de los pocos turistas que vienen a Brozas y contempla complacido, con sosegada admiración, las calles y las casas buen ordenadas y conjuntadas de Brozas. Esto fue lo que me animó hace unos 20 años preguntarle e insinuarle en Madrid al entonces consejero de Cultura de la Junta de Extremadura, fallecido recientemente, Paco Muñoz, si la villa de Las Brozas podría ser considerado conjunto histórico artístico, cosa que ya es hoy una realidad.

 

            Y termina el autor del libro citando al periodista y escritor Italo Calvino, cubano de nacimiento e italiano de nacionalidad, cuando escribió: “El viajero reconoce lo poco que es suyo al descubrir lo mucho que no ha tenido y no tendrá”.

miércoles, 6 de diciembre de 2023

Las Brozas en 1929

 


Tomás Martín Gil

 

Si hace poco escribía una crónica de la aportación de la villa de Las Brozas en la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929, hoy vamos a entresacar unos textos de cómo veían el pueblo dos personas en ese año. Uno era el fundador del Ateneo cacereño y secretario de la Coral Cacereña, el escritor José Blázquez Marcos, quien publicó ese año la guía artística “Por la vieja Extremadura, provincia de Cáceres”, ilustrada con 148 fotografías del académico correspondiente de la Historia y fundador de la revista “Alcántara”, el cauriense Tomás Martín Gil. El libro fue impreso en la capital por Tipografía “Extremadura”. A la villa le dedican página y media y tres fotografías. Veámoslo detenidamente. Por aquella época, la villa tenía unos 5.700 habitantes, muchos comparados con los 1.800 que tiene en la fecha de hoy.




 

El autor le dedica una entradilla para reconocer la importancia de la población y después se centra en los personajes ilustres para terminar con una amplia reseña dedicada a la iglesia de Santa María, el mejor templo parroquial de la diócesis de Coria - Cáceres, al que popularmente en Las Brozas le llamamos “La catedralina”.

 

 “Pasadas las cuestas de Araya, pronto nos acercamos a Brozas de cuyo señorío y valía en la historia nos avisan, antes de llegar, la esbelta torre de Santa María y los viejos muros de algunos palacios y caserones. Su nombre se exalta y ennoblece ante el recuerdo de tantos hijos ilustres, caballeros, capitanes, monjes, sabios y artistas: Frey Nicolás de Ovando, el colonizador de la Española; el adelantado del Yucatán, Montejo el Viejo, Carvajales, Argüelles, y por encima de todos, el sabio humanista y maestro de la escuela salmantina Francisco Sánchez “El Brocense”.

Y donde habitó también Elio Antonio de Nebrija con toda su familia.




 

“Y en la villa nos sorprenden y deleitan el recio carácter y sobrio tipo castellano de su Plaza Mayor, el sello solariego y viril de algunas casas antiguas y sobre todo la mole amplia y severa del templo de Santa María.

 

Posteriormente se describe ampliamente la labor del edificio de la iglesia.




 

Es éste un buen ejemplar gótico del siglo XVI, con mezcla ya de elementos de gusto renacentista…En el exterior destaca la portada principal (foto 52 del libro) de labor decorativa bastante profusa, mostrando la puerta entre dos pináculos resaltados góticos y con haces de columnillas, cresterías florenzadas y grumos, archivoltas muy adornadas y con figuras de ángeles en relieve sobre las cuales aparece un ventanal de medio punto…




 

El interior es de una elevación y una amplitud sorprendente; tiene tres naves separadas por esbeltos pilares (foto 53) de los que arrancan los nervios de las bóvedas ojivales que forman estrellas, con sus claves historiadas y ornamentadas.

 

Esta guía hace una amplia descripción de los monumentos de la ciudad de Cáceres, y después hace varios recorridos por la provincia, destacando el de la ruta Arroyo del Puerco, Brozas y Alcántara, además de por Coria, Plasencia, Yuste, Trujillo, Guadalupe para concluir con unas notas finales con las costumbres, fiestas, habla popular y el folklore de la provincia.

viernes, 1 de diciembre de 2023

Brozas en la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929

 



 

            Me acaba de llegar a mi ordenador un artículo del que fuera director del Museo de Cáceres, Juan Manuel Valadés Sierra, publicado en 2013 en la revista de Estudios Extremeños y titulado “La aportación cacereña al pabellón de Extremadura de la Exposición Ibero - americana de Sevilla (1929)”.

 

            Cuenta Valadés que fueron las diputaciones provinciales las que aportaron la mayoría de los objetos que se expusieron en esta magna exposición. Hubo un comité que ofreció lo que se iba a mostrar en la Exposición Iberoamericana. El pabellón de Extremadura se encontraría cerca del de Portugal, por su cercanía al país vecino.


 

    De Brozas hubo dos muestras a la cual más interesante. Una fotografía de la fachada de Santa María hecha por Tomás Martín Gil y publicada en un libro de José Blázquez Marcos, titulado “Por la vieja Extremadura. Guía artística de la provincia de Cáceres”, editado en 1929 por “Tipografía Extremadura” y también “La Minerva” de Francisco Sánchez de las Brozas, El Brocense, en su edición de 1587, publicada en Salamanca. Hay que decir, como impartí, hace años, en una conferencia en el patio del convento de Santo Domingo de Villanueva de los Infantes,  que el escritor Francisco de Quevedo fue uno de los discípulos de Francisco Sánchez.

 




            En su trabajo, José Manuel Valadés amplía esta información diciendo que: el reparto de las fotografías refleja el desequilibrio general que aquejaba a todos los contenidos de la Casa de Extremadura; de los más de cuatro centenares de imágenes, tan solo 107 correspondían a lugares de la provincia de Cáceres: seis de Alcántara (cinco de Martín Gil y una de Javier), una de Brozas (de Martín Gil), cuarenta y cinco de Cáceres (todas de Javier), dos de Coria (de Martín Gil), quince de Guadalupe (todas de Martín Gil), dieciséis de Plasencia (de Javier), ocho de Trujillo (de Javier), doce de Valencia de Alcántara (de Carpintero) y dos de Yuste (de Martín Gil), quedándose por tanto fuera de la selección comarcas enteras como la Sierra de Gata o Las Hurdes, y enclaves importantes como Arroyo de la Luz, Garrovillas, Hervás, Montánchez, Serradilla, Jarandilla, etc.

 

            Sin embargo, fue mucho más interesante la aportación bibliográfica de la provincia de Cáceres. Más importante fue la aportación de la Biblioteca de Cáceres; para ello, la Dirección General de Bellas Artes publicó una circular, el 28 de febrero de 1929, dando orden a los directores de las bibliotecas provinciales de que facilitasen los préstamos de obras para la Exposición de Sevilla. De acuerdo con ello, parece que los libros prestados por la Biblioteca cacereña, entonces ubicada en el Instituto de Segunda Enseñanza

martes, 31 de octubre de 2023

Mi historia como cronista oficial

 



 

Ahora que se cumplen 30 años tras ser elegido por una unanimidad en el Ayuntamiento de la villa de Las Brozas por parte de los grupos políticos (PP, PSOE e Izquierda Unida), acabo de recibir, vía internet, un singular libro de mi amigo y compañero cronista de Bedmar (Jaén), José Manuel Troyano Viedma, titulado “Los cronistas oficiales de la época contemporánea (1852 – 2022), con 942 páginas en el que trata la historia de los cronistas del Reino de España, de la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales (RAECO) y sus relaciones con los cronistas hispanoamericanos, portugueses e italianos a lo largo de la época moderna. José Manuel es miembro de honor de la RAECO.

 

El libro se lo ha dedicado a D. Enrique de Aguinaga López, decano que fue de los Cronistas Oficiales de Madrid y de España (1954-2022), y mi profesor de redacción periodística en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid cuando estudié Periodismo, y fallecido el año pasado a la edad de 99 años.

 

A largo de sus capítulos presenta a los presidentes y miembros de honor de la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales, y contando el origen de los cronistas de los pueblos, ciudades y regiones de España, así como el uso y el nacimiento de los cronistas oficiales y del Cuerpo General, entidad que funcionó desde 1948 a 1962 y la creación de la Asociación Española de Cronista Oficiales en 1976, reconvertida en Real Asociación desde marzo de 2008.

 

También hace una detallada relación de las diversas asociaciones regionales, entre ellas la extremeña, de la que un servidor fue su promotor y presidente de su Junta Gestora, lo que me convierte hoy en ser el cronista extremeño más veterano en la actual Real Asociación Española de Cronistas Oficiales.

 

Es para mí un orgullo y satisfacción ser citado unas 80 veces en sus más de 900 páginas del libro, pues el autor recoge varias de mis numerosas crónicas publicadas en mi blog “Crónicas de las Brozas” http://cronistadelasbrozas.bogspot.com por reseñar desde el año 2007 congresos u otras actividades profesionales, al que hay que añadir el blog “Noticias de Hinojal”, de mi pueblo natal, del que salí a la tempranísima edad de cuatro años, y del que también tengo el honor de ser su cronista oficial. https://noticiasdehinojal.blogspot.com




Foto de los cronistas de España en el Ayuntamiento de Cáceres. Año 1996


Me encanta decir que a los tres años de ser elegido cronista organice en 1996 el XXII Congreso de la Asociación en Cáceres, siendo por entonces el presidente nacional el riojano Jerónimo Jiménez, pasando una jornada en el vecino pueblo portugués de Castelo de Vide y en el que fue nombrado Miembro de Honor: S. A. R. el Príncipe de Asturias, D. Felipe de Borbón y Grecia, tras haber informado el presidente de la A.E.C.O. en la Asamblea General Ordinaria que se celebró en Cáceres el 18/X/1996.

 



De este congreso José Manuel Troyano hace la siguiente reseña: El 2º Congreso que se celebró en tierras extremeñas y portuguesas, con Cáceres, Zafra y Castelo de Vide, como ejes principales, entre los días 17al 20 de octubre de 1996, catorce años después del que organizara en 1982 el entonces cronista de la ciudad de Cáceres y archivero municipal, Antonio Rubio Rojas.

 

Por otra parte, Antonio Linage Conde cronista de Sepúlveda (Segovia) nos describió de esta manera la realización y los logros del mismo con su especial óptica y forma de recordarnos las cosas, sin olvidarse de uno de los principales motores de este congreso, Juan Francisco Rivero Domínguez, Cronista Oficial de Las Brozas (Cáceres): “Y en esta otra reunión, también empezada en Cáceres y terminada en Zafra, pero pasada la Raya de Portugal, al acercarnos a ella, por la espléndida Valencia de Alcántara, quienes tuvimos el privilegio de compartir su autobús y ser ilustrados por él de cómo se vivió desde estas tierras fronterizas la separación de los dos países, nos confirmamos en la hondura de su sensibilidad y su sapiencia. Por cierto, qué nos creíamos, los que a aquel Congreso asistimos, que nada en el futuro podría hacer la competencia a la resurrección de un Menú del Siglo de Oro con que se nos despidió en el Monasterio de Guadalupe. Y es cierto. Sin embargo, ahora… pero sigamos. Cáceres, Castelo de Vide, Zafra. Trío de ciudades y trío de cronistas de Extremadura. Esta asamblea ha sido obra de Francisco Rivero, el de Brozas, saberes recónditos de El Brocense en versiones del latín al griego, saberes de los pastores y las abuelas en el secreto supremo de las migas. Y allí Francisco Rivero, encarnándonos las humanidades eficaces. En Zafra, el suyo, Francisco Croche de Acuña, nos envolvió el anchuroso y apacible lugar, creado por la hospitalidad que se diría, en esa su virtud de enseñar profundo y calar hondo sin que se note apenas.

 

Como 30 años como cronista oficial dan para mucho en más de 900 páginas de la historia de los cronistas oficiales de España, habrá otras crónicas relacionadas con un servidor.

 

Continuará…

miércoles, 4 de octubre de 2023

Brozas, en Extremadura Universal

 




    Extremadura Universal pretende ser un referente de Extremadura, actuando como palanca impulsora de proyectos empresariales de nuestra región, tomando como punto de partida nuestra gastronomía, nuestro turismo y nuestra industria.


Para saber lo que es invertir en Extremadura


www.investinextremadura.com


Y ver el vídeo:


https://youtu.be/eoeSQY88mL4?si=-_HbuxHs8IkPWDpn



domingo, 10 de septiembre de 2023

Relación de Conrado Sánchez Varona con Las Brozas

 


Conrado Sánchez Varona

 

Una vez escrito el artículo sobre el autor del cuadro de El Brocense, una persona del pueblo me indica que Conrado Sánchez Varona fue maestro de pintura del broceño Julio López Bejarano, que con el tiempo creara el cine Casimiro Ortas, posteriormente Cine López.


Ver el primer artículo en el siguiente enlace:

https://cronistadelasbrozas.blogspot.com/2023/09/el-cuadro-de-el-brocense.html


 

Teresa López, nieta de Julio y compañera y quinta de la generación de 1953, me informa de lo siguiente: “Sánchez Barona fue profesor de mi abuelo Julio y compadre de mis bisabuelos; además una de sus nietas regaló un cuadro en el que aparece mi bisabuelo Toribio López Bravo y su madre en la ermita de San Blas, en la ciudad de Cáceres. Me contaron que está en un salón de la Diputación provincial”.



Cuadros de Julio López Bejarano


 Para conocer un poco más la obra del discípulo de Varona, el broceño Julio López su nieta me añade: Tengo un par de cuadros al carboncillo de mi abuelo corregido por él y otros familiares tienen más. Me gustaron tanto que les hice unas fotografías donde están su firma”.



 

Teresa López me facilitó esta curiosa invitación de boda de su abuelo, enviada por los padres de éste y que dice así: Toribio López Bravo y Francisca Bejarano Quintana tienen el gusto de invitar a usted al enlace matrimonial de su hijo Julio con la joven Teresa Porras cuyo acto se celebrará el día 1º de octubre en la Iglesia de los Santos Mártires, de Brozas. La invitación está fechada en septiembre de 1916.

 

Y para conocer algo del pintor Varona, ampliando lo que ya he escrito en el artículo anterior, se puede decir con datos aportados por el cronista de Malpartida de Plasencia, Floro Rodríguez Oliva.


 Matilde Sánchez


Conrado Sánchez Varona recibió sus primeras lecciones de pintura a los 12 años de Francisco Ruiz de la Hermosa en Plasencia, y de Higinio Pérez, en Cáceres. En 1892 consiguió en la Exposición de Badajoz una medalla por el retrato a lápiz de Alfonso XII. De las obras que se mostraban en una exposición de 1997, a la que acudió su hija Matilde Sánchez, que por entonces ella residía en Méjico, (Y tiene una foto en la calle Arco de España de Cáceres, en la misma calle donde un servidor vivió en el curso 1961-1962 cuando estudiaba primero de Bachillerato en el antiguo Instituto de Enseñanza Media “El Brocense”, en la ciudad antigua) había una mención honorífica de la exposición nacional de 1897 y una medalla en la exposición regional de Ciudad Rodrigo por su cuadro “Descanso y meditación”. Sus dos retratos dedicados a su madre aparecen como las mejores realizaciones, por las que consiguió medallas en Badajoz y Béjar. Por el “Retrato de su hermana Aquilina” y el “Desnudo de niña” recibió una mención en la Exposición Nacional de 1904.



Retrato de Aquilina Sánchez Varona

 

Desnudo de niña


Nuestro biografiado residió en Madrid y en Oviedo. Entre 1908 y 1914 enseñó Dibujo en la Escuela de Artes de Cáceres. En junio de 1914 se posesionó de la Cátedra de Dibujo y Caligrafía de la Escuela Profesional de Sevilla, sin desvincularse de su trabajo de pintor en Cáceres, donde pasa sus últimos años de vida, falleciendo el 8 de noviembre de 1944.


El embargo, de Gabriel y Galán


Vendió muchos cuadros, sobre todo de retratos de encargo y de personajes históricos: San Pedro de Alcántara, El Brocense, Gabriel y Galán, Alfonso XIII…

sábado, 9 de septiembre de 2023

El cuadro de El Brocense

 



 

            Como todos sabemos, este año se celebra el V centenario del nacimiento de El Brocense y muchos broceños han visto que en el salón de sesiones del Ayuntamiento de la villa hay un cuadro pintado de nuestro hijo más ilustre. Si uno se acerca al cuadro, en la parte baja izquierda se lee la firma del autor: Conrado Sánchez Varona. Sevilla 1928.

 




            ¿Y quién es este tal Conrado Sánchez Varona? Uno se va a internet y veo que se trata de un pintor nacido en 1876 en Malpartida de Plasencia. Me faltó poco para ponerme en contacto con su cronista oficial, mi buen amigo Floro Rodríguez Oliva, quien me ha facilitado mucha información sobre su famoso paisano.

 


Autorretrato de Conrado Sánchez Varona, año de 1898


            Conrado Sánchez Varona nació en Malpartida de Plasencia el 14 de febrero de 1876 en la calle Escuelas numero1, de Eduardo Sánchez Garrido, natural de Plasencia y maestro de profesión, y de María Varona Oliva, de Malpartida como toda su familia. El recién nacido fue inscrito en el Registro Civil con los nombres de Conrado Aquilino de la Concepción. Realizó sus estudios en Cáceres en 1888 y en Plasencia dos años más tarde, y luego en Madrid de 1890 a 1897 en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado, Sección de Pintura de Historia.

 

            Su pintura es figurativa, realista y académica, colorista y en algunos casos con recuerdos de los mejores impresionistas franceses. Acudió a las Exposiciones Nacionales de 1897 y 1904, a las de Badajoz y Béjar en 1905 y a otras provinciales y locales. Sus obras están repartidas por Cáceres, alguna de ellas en el Museo de Arte y Cultura, Madrid, Plasencia, Villafranca de los Barros, Almagro y Sevilla.

 

            Su pintura en cuadros de personajes como Alfonso XIII, San Pedro de Alcántara, Gabriel y Galán o El Brocense es descrita de la siguiente manera: “Sus personajes silenciosos hablan de caracteres propios, de la belleza interior contenida en papel o en un lienzo. Una belleza de fuerte emoción, de lo poético, de lo misterioso, sólo perceptible desde el conocimiento y el apasionamiento de las formas artísticas”.

 




            Sánchez Varona tiene varias etapas pictóricas. La que trata el cuadro de El Brocense, es, según Dionisio Clemente publicada en “Aires chinatos”: “La etapa de Sevilla, que va de 1920 a 1930 desarrolla temas de flores, jardines, retratos, cuadros con temas extremeños, todo ello con una estética cercana a Art Nouveau colorista e innovadora”.

 

            Sánchez Varona tiene una sala con sus obras en el Museo de Historia y Cultura “Casa Pedrilla” de Cáceres, que fue una labor realizada allá por el año 1995, por el entonces presidente de la Diputación Manuel Veiga.

 

            Este pintor falleció en la ciudad de Cáceres el 8 de noviembre de 1944, donde tiene una calle entre las calles Parra y Moret, donde está el hotel Alfonso IX.


    Una vez escrito este artículo, una persona del pueblo me indica que Conrado Sánchez Varona fue maestro de pintura del broceño Julio López Bejarano, que creara el cine Casimiro Ortas,  posteriormente Cine López.  


Y continua en este segundo artículo:

https://cronistadelasbrozas.blogspot.com/2023/09/relacion-de-conrado-sanchez-varona-con.html

domingo, 3 de septiembre de 2023

Un misterio inglés en Las Brozas

 



 

            En el palacio de la villa de Las Brozas existe una lápida de mármol con una inscripción en latín que dice:

 

IN MEMORIAM

ILLM

GULLIEMI ERSKINE

SCOTIAE BARONETI

QUI

EQUITATUS OMNIS

BRITANNICI

PRAEFECTUS

IDEBUS FEBRUARI

ANNO DOMINE

MDCCCXIII

OBIIT

AETATIS

La lápida es funeraria. Y su traducción hecha por el profesor de Latín de la Universidad de Extremadura, Manuel Mañas, traductor del latín al español de la biografía de El Brocense escruta por el valenciano Gregorio Mayans, y Premio Tenca de Oro 2023

 




Lo que dice es lo siguiente:

 

En memoria del Ilustrísimo Guillermo Erskine, barón de Escocia, el cual, general en jefe de toda la caballería británica, murió el 13 de febrero del año del Señor de 1813, a la edad de... (falta el número de años).

 

            Pero ahora viene lo bueno según la biografía de William Erskine, este militar británico murió en la Guerra de la Independencia de 1808 a 1814, se arrojó por una ventana en Portugal al perder una batalla. ¿Cómo es posible que su lápida funeraria se encuentre en la villa de Las Brozas?. Ese es un gran misterio que intentaremos descifrar.

 



Hace años presenté una ponencia sobre el padre Manuel Amado, en los Coloquios Históricos de Extremadura que se celebran en Trujillo. Esto decía de Guillermo Erskine:

 

“Un día, en plena Guerra de la Independencia, un joven broceño, Manuel Amado Corchado, se encuentra, allá por 1811, a la salida de misa mayor de la iglesia de Santa María de Brozas al general jefe de la caballería inglesa, Sir Guillermo Erskine (1770 – 1813), segundo Barón de Erskine of Torrie. Éste le preguntó al muchacho si es británico, pues por su aspecto lo parecía. El joven le contestó perfectamente en su idioma y se sorprendió que se hable el inglés en un pueblecito de Extremadura. Don Guillermo no sabía que el mozo había estudiado en Plasencia, además, portugués, francés, italiano y alemán. Manuel Amado entro primero a las órdenes de William Erskine, aplicándose con interés en el arte militar, especialmente en la esgrima y en el tiro de pistola. Al saberlo, el jefe de las tropas británicas en la Península Ibérica, Lord Wellington, le nombró su intérprete personal con el grado de capitán. Con el tiempo, este joven se ordenó diácono en Portalegre (Portugal) y tomó el hábito de la orden dominica, siendo un gran predicador y un prestigioso escritor religioso”.

 

El diccionario Oxford de Biografías Nacionales del Reino Unido indica de Sir William Erskine que nació el 30 de marzo de 1770. Era hijo del teniente general Sir William Erskine, primer Baronet, quien le cedió el título de barón, ostentándolo desde 1795 hasta la fecha de su suicidio en 1813.

 




Lord Wellington no le tenía ninguna estima y en su biografía se cuenta que se le declaró oficialmente loco y deshonrado y degradado militarmente en una ceremonia a la que se la denomina cajero, por lo que según este diccionario Oxford de biografías inglesas se quitó la vida en Lisboa arrojándose por una ventana diciendo al saltar: “Porqué hice eso?

 

De ahí que nos preguntemos, porqué si se suicidó en Lisboa, su piedra funeraria está en el castillo de Brozas

domingo, 27 de agosto de 2023

Un día de la Tenca muy atractivo

 



 

            Cada año que pasa -y van 35- la Fiesta de la Tenca se organiza y sale mejor. Hay más atracciones para niños y mayores, incluso llegan a participar actores del propio pueblo, como fue el caso del grupo de teatro Mojiganga, dirigido por José Miguel Salgado, o el torcido del cordón de San Antón, por el grupo folklórico Jumadiel.

Crónicas de Las Brozas: Entrega de la Tenca de Oro (cronistadelasbrozas.blogspot.com)

 

            La noche del viernes 25 fue muy interesante, Yo sugiero que a partir de ahora haya dos jornadas, Una dedicada a la entrega del premio “Tenca de Oro” a una personalidad y a una institución, organizada de manera protocolaria y el día siguiente que sea festivo para los del pueblo organizador, con concursos de pesca y gastronómico, incluido el simpático tren turístico y el mercado medieval.

 




            Otra sugerencia mía es la de conseguir que la tenca tenga Indicación Geográfica Protegida, le daría más fama y habría que cuidar el producto final. Esa es una labor que le corresponde al gobierno de la Junta.

 


 


            Me trasladé a mediodía por la calle que lleva a la Plaza Nueva (oficialmente plaza de Ovando) y vi numerosas tiendas con productos extremeños y de otras regiones de España, como unos ricos licores de un pueblo de la provincia de León, Santibáñez del Bernesga. Me parece muy bien que la Diputación tenga un pabellón para promocionar turísticamente la comarca. Pedí a Tito, profesional de la Diputación que me facilitase una colección, pues como profesional del turismo me interesan estos temas. Tomé varios folletos, como uno de ecoturismo en la provincia de Cáceres; otro dedicado a la gastronomía de la provincia y un tercero de la comarca Tajo Salor Almonte, donde se enclava la villa de Las Brozas con otros 14 pueblos más, sin olvidarse de uno dedicado a los puntos de observación de aves dentro de la Extremadura rural y que tenemos la obligación de difundir.

 

 



            Tras difundir la crónica de la entrega del Premio “Tenca de Oro” a Nico Romero y a los estudiosos de El Brocense, el ganador del concurso de pesca del año 1990 que se celebró en Brozas, Justo Marchena, me acaba de enviar unas fotografías de ese año, cuando el entonces alcalde Hilario Moreno le impuso a la periodista de Alburquerque, Isabel Gemio, la Tenca de Oro, mientras un servidor, como uno de los organizadores de la Fiesta de la Tenca, me tocó presentar en el acto a la colega extremeña, quien le gustó tanto que durante la semana siguiente la llevaba prendida de la solapa en su programa de Televisión Española.


Un video de la fiesta