Sigo
con mi casi monotema en mi convalecencia de rodilla, aprovecho para estudiar la
figura de nuestro paisano broceño Casimiro Ortas y Rodríguez para diferenciarlo
de su padre Casimiro Ortas y Navarro, éste nacido en la localidad pacense de
Olivenza, ambos grandes actores de la zarzuela y teatro cómico de la escena
española.
Me
doy cuenta que la primera película muda de ambos se titula “Los apuros de un paleto”, dirigida en 1917 por el
dombenitense Francisco Camacho, autor de dos grandes obras maestras: “El cura de aldea” y “Nobleza Baturra”, ésta
como ayudante de dirección, ambas rodadas en 1935 por CIFESA, Compañía Industrial
del Film Española, Sociedad Anónima.
La
película viene a ser una primera versión de la de Paco Martínez Soria,
discípulo de Casimiro Ortas, de “La
ciudad no es para mí” La película del actor brocense, en la que también interienen
Casimiro Ortas padre y Consuelo Mayendía, se trata de que un pueblerino llega a
Madrid y entra en el centro comercial que había ese año en la céntrica calle de
Diego de León y causa una serie de problemas que provocan la hilaridad del
espectador.
Se
trata de una película muda de seis minutos de duración, cuyo guión fue escrito
por el afamado escritor de comedia Pedro Pérez Fernández, quien junto a Pedro
Muñoz Seca formaron el dúo de los Pericos. La producción corrió a cargo de la
compañía Soto Films.
La
valenciana Consuelo Mayendía era soprano en las zarzuelas que se estrenaban en
el Teatro Apolo, donde era primera figura con Casimiro Ortas. Estrenó obras de
Carlos Arniches y de los Hermanos Álvarez Quintero, entre ellas “Diana la Cazadora o Pena de muerte al amor”
en 1916, haciendo pareja con nuestro paisano. Casimiro interpretó el papel de
Dieguito Florido.
En la foto, ambos personajes.
En la foto, ambos personajes.
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