Mi amigo el historiador natural de
Carmona (Sevilla), asentado profesionalmente en Extremadura, Esteban Mira
Caballos, acaba de publicar “Francisco Pizarro, una nueva visión de la
conquista del Perú” editado por Crítica.
He
compartido con Esteban algunas actividades en un campo para los dos muy
queridos como el de trabajar en el tema de la biografía de Nicolás de Ovando,
mi paisano de la villa cacereña de Las Brozas, de la que uno tiene el honor de
ser su cronista oficial, y que fue el primer gobernador español en Indias, concretamente
en la isla de la Hispaniola, que hoy conforman dos naciones (República Dominicana
y Haití) desde 1502 hasta 1509, sustituyendo a Cristóbal Colón.
Este tema, como toda la extensa obra de
Pizarro, Mira Caballos lo trata con otra visión, hombre que intenta despegarse
de las teorías tradicionales del hombre conquistador y ve también la historia
desde el punto de vista indígena, de los pueblos conquistados, con algunas hipótesis,
que pueden ser acertadas o rechazadas por la historiografía actual.
En las Brozas, concretamente en el
salón de actos de ese palacio reconvertido en Casa de Cultura, “La Concordia”,
le presenté hace unos tres años uno de sus últimos libros “La gran armada colonizadora
de Nicolás de Ovando. 1501-1502”. En esta ocasión recibo directamente un sobre
de Carmen Esteban, directora editorial de Crítica la última obra del doctor en
Historia de América, Mira Caballos.
Quiero resaltar aquí que este libro de
412 páginas, con numerosos grabados y fotografías a color, 209 están dedicadas
a la biografía de Pizarro y el resto se reparte en fuentes, a la que dedica 35,
así como un total de 17 apéndices de los más variados temas, desde la
genealogía de los bisabuelos, abuelos y tíos paternos de Francisco Pizarro,
hasta la ascendencia comparada de éste con Hernán Cortés, así como otros
dedicados al valor del oro o las esmeraldas obtenidas en diversas expediciones.
Igualmente hay un precioso glosario pata captar, aun mejor, algunos términos
propios del mundo antiguo inca. Para el estudioso de este conquistador español
que dio todo un imperio, el Tahuantinsuyu inca al imperio español, hay
numerosos datos en las notas, así como una larga bibliografía y un utilísimo
índice alfabético, de donde entresaco algunos apuntes para recalcar la figura
del jefe de Pizarro en la Hispaniola, mi paisano Nicolás de Ovando, del que el
año 2000 escribió una biografía, como de otros; Hernán Cortés o Hernando de
Soto.
En su biografía, Mira Caballos habla
del ajusticiamiento de la princesa Curi Ocllo, hermana-esposa del inca Manco
Capac. Cuando el inca se alzó en armas, huyó con ella. Pizarro atacó el
campamento del inca y capturó a su esposa. Cuando los indios mataron a los emisarios
españoles que iban a negociar, Pizarro mandó ajusticiar a la princesa, azotándola
y asaetándola hasta la muerte y el historiador considera que fue un acto
similar al que hizo Ovando con la princesa taina Anacaona en la Hispaniaola,
tres décadas antes y que forma parre de la leyenda negra española, esa que
tanto hacemos los españoles por difundir y otros pueblos cercanos (léase
franceses o ingleses) por difuminar sino tapar.
Más adelante el biógrafo indica lo siguiente:
“Mi hipótesis, que quizá nunca logre
verificar científicamente, es que Gonzalo Pizarro y Francisca González, sí
fueron sus padres (de Francisco Pizarro), existiendo demasiadas pruebas y demasiada
unanimidad para dudar de ello. Pero no biológicos, sino adoptivos. Intentaré
exponer mis argumentos lo más claramente posible: Pocos saben que Gonzalo
Pizarro tuvo al menos dos hermanos varones; Juan y Diego, así como un primo
hermano con el que tuvo una estrechísima relación, Francisco Pizarro. Juan Pizarro llegó a la Española en la armada
de Nicolás de Ovando en mayo de 1502 y se asentó en la pequeña villa de San
Juan de la Maguana donde ostentó una encomienda de 44 indios”.
Mira Caballos argumenta, en contra de
numerosos historiadores, que dicen que Pizarro llegó a la isla de la Española,
hacia 1504 pues “no comparece en la documentación
al llegar con posterioridad a la pacificación de la isla cuando ya se había
repartido el botín y se habían realizado los repartimientos”, de ahí que a su
tío Juan le tocaran 44 indios en la encomienda de San Juan de la Maguana. Otros
historiadores dicen que llegó en la flota de Nicolás de Ovando en 1502 como
paje de éste, pero Mira indica que no hay ningún documento que lo acredite.
En esta biografía de Francisco Pizarro,
Mira Caballos la basa en el empleo exhaustivo de las fuentes. Nos sugiere mirar
la vida del conquistador del Perú de otra manera y “enfrentándonos a la realidad del acuerdo con la mentalidad de nuestro
tiempo y superando una vieja tradición de mitos y recelos”.
Precio
del libro: En papel, 23,90 euros y en “e-book”: 13,99 euros.
Este fin de semana estoy leyendo el libro, cuando desde Honduras, un amigo, José Antonio Zúñiga, presidente del Skal Club de Tegucigalpa, me remite un artículo de un periódico de Chile, www.economiaynegocios.cl titulado "Los quipus incaicos guardan mucho más que sólo números", en el que se cuenta la investigación de un estudiante de la Universidad de Harvard sobre la escritura y las cuentas de los incas. Pica este enlace y leerás este artículo:
http://www.economiaynegocios.cl/noticias/noticias.asp?id=432151
Este fin de semana estoy leyendo el libro, cuando desde Honduras, un amigo, José Antonio Zúñiga, presidente del Skal Club de Tegucigalpa, me remite un artículo de un periódico de Chile, www.economiaynegocios.cl titulado "Los quipus incaicos guardan mucho más que sólo números", en el que se cuenta la investigación de un estudiante de la Universidad de Harvard sobre la escritura y las cuentas de los incas. Pica este enlace y leerás este artículo:
http://www.economiaynegocios.cl/noticias/noticias.asp?id=432151